La crisis económica provocada por el gobierno de Javier Milei afecta a todos los sectores de Argentina y un histórico bar porteño tuvo que cerrar sus puertas tras no poder sostener el lugar por la caída del consumo.
La Boca, uno de los barrios más emblemáticos de Buenos Aires, despidió a uno de sus referentes culturales más antiguos. La Buena Medida, un bodegón que había acompañado generaciones desde principios del siglo XX, cerró sus puertas definitivamente, dejando un vacío difícil de llenar.
Este establecimiento, reconocido como Bar Notable por su valor histórico y cultural, estuvo ubicado en la esquina de Suárez y Caboto, justo frente a la emblemática Plaza Solís donde se encuentra la piedra basal del Boca Juniors. Su historia se entrelaza con la del club, ya que según Leandro Vesco, periodista y actual Ministro de las Pulperías y Bodegones de la III República de La Boca, el bodegón abrió sus puertas en 1905, el mismo año de la fundación del club, aunque desde el Gobierno de la Ciudad sostienen que fue en 1930.
Más que un simple restaurante, La Buena Medida fue un refugio para vecinos, trabajadores portuarios e inmigrantes, un punto de encuentro donde se mezclaban las historias de varias generaciones. Su ambientación clásica, con mesas de madera y un mostrador antiguo, junto a platos tradicionales como la milanesa a la napolitana y las carnes a la parrilla, formaban parte del alma del lugar.
Un bodegón lleno de historia
Este bodegón también tuvo un papel en la cultura local, siendo escenario de filmaciones, reuniones comunitarias y momentos que quedaron grabados en la memoria colectiva del barrio. Sin embargo, la crisis económica y la caída del consumo golpearon fuerte.
La Buena Medida cerró por primera vez en 2018 por la crisis del gobierno de Mauricio Macri y aunque reabrió en 2021 gracias al esfuerzo de un vecino que buscó revivir su espíritu, la falta de renovación del alquiler y los costos insostenibles marcaron su destino final.
La despedida fue emotiva: vecinos, clientes habituales y gente del barrio se congregaron para compartir el último día de este histórico lugar que representó un espacio de pertenencia para los boquenses.
Su cierre suma otro nombre a la lista de Bares Notables que no pudieron resistir las dificultades económicas en los últimos años. El sector gastronómico fue de los más golpeados por la caída del consumo sumado a que para los extranjeros ya no es tan conveniente el tipo de cambio.
