Por ahora, es más amenaza que certeza. "Hay muchos off sin padres", ironizaban en la conducción del bloque de diputados de Unión por la Patria que preside Germán Martínez. Algo parecido sostenían desde el sector de Sergio Massa. "El Frente Renovador no está empujando ninguna situación", replicaban. Lo cierto es que los rumores de pasillo advierten sobre una posible división en el principal bloque opositor tanto en Diputados como en Senadores, que se reconvertirían interbloques donde cohabitarían sectores con diferentes referencias nacionales: Cristina, Massa, Kicillof y los gobernadores. En una reunión en Diputados de días pasados hubo un consenso mayoritario respecto a las bondades de la unidad, al menos en el trabajo parlamentario, pero las novedades podrían producirse luego del 10 de diciembre, cuando asuman los nuevos legisladores. O incluso postergarse hasta marzo, en el arranque de las sesiones ordinarias.
En medio de las tensiones internas, los bloques parlamentarios de Unión por la Patria -conservan esa denominación- se mantuvieron unidos y firmes en el rechazo a las politicas de ajuste de Javier Milei. En los meses previos a las elecciones nacionales, sumaron varias sesiones en las que consiguieron victorias a repetición contra un oficialismo desesperado por tratar de que el Congreso dejara de funcionar. Sin embargo, luego del sorpresivo triunfo de La Libertad Avanza en octubre, varios gobernadores cambiaron de postura y comenzaron a buscar la manera de acercar posiciones con el Ejecutivo, urgidos de soluciones para sus problemas financieros y de obras de infraestructura. Entre ellos, algunos pertenecientes a UP, que ya habían mostrado alguna predisposición al diálogo con la gestión libertaria.
De hecho, el gobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo, tiene su propio bloque legislativo, "Independencia", que se mantendrá con tres diputados luego de diciembre. Muchas veces acompañaron al Ejecutivo, salvo en estos últimos tiempos de campaña electoral. Su par de Catamarca, Raúl Jalil, contará con cuatro diputados pero, por lo que se sabe, dentro de Unión por el Patria aunque con criterios propios. Lo que sucedió durante algunas votaciones en este primer tramo de Milei fue que hubo legisladores catamarqueños que se ausentaban o que votaban de manera diferente. El viernes pasado, Jalil fue el primer mandatario en acudir al despacho del flamante ministro del Interior, Diego Santilli, y prometió colaborar con el Ejecutivo para atraer inversiones. ¿Integrará un bloque común con Jaldo? Vale destacar que ambos ganaron las elecciones en sus provincias con amplitud.
También circulaban muchas versiones respecto a los representantes de Santiago del Estero, con el gobernador Gerardo Zamora a la cabeza, quien en diciembre asumirá una banca de senador. Como los catamarqueños, los diputados santiagueños supieron tener actitudes dispares en algunas votaciones claves para el Gobierno. Además, Zamora suscribió el Pacto de Mayo y participó de la reunión de 20 mandatarios convocada por Milei días atrás. Los rumores indicaban que Zamora no seguiría en el Senado una postura de oposición dura como la del interbloque de Unión por la Patria, por lo que conformaría una bancada aparte junto con su compañera de fórmula, Elía Moreno. El tercer senador santiagueño, el peronista José Neder, quedaría en UP bajo la conducción de José Mayans.
En marzo pasado, ya hubo un desprendimiento de cuatro senadores de las provincias de La Rioja, Catamarca, Jujuy y San Luis que formaron el subbloque "Convicción Federal", como forma de desmarcarse de la conducción de Cristina Kirchner. Con todo, se mantuvieron dentro del interbloque de Unión por la Patria. Zamora, de acuerdo a lo que sirculaba en los pasillos del Congreso, armaría una bancada aparte. Representaría una pérdida importante para la bancada de UP, que ya de por sí tendrá seis senadores menos: de 34 integrantes quedará en 28, y finalmente en 26 si se apartaran los santiagueños. Zamora supo tener un vínculo muy cercano con CFK, pero hoy imaginaría su futuro político por fuera del cristinismo.
En cuanto a los diputados del Frente Renovador, los imaginaban formando parte del interbloque de Unión por la Patria pero con bancada propia, más cerca de los gobernadores que de Cristina. "No quiero inflar ninguna interna del bloque", aseguraban que fue la instrucción que bajó Sergio Massa a sus representantes en el Congreso. Sostenían que desde el FR no impulsaban ninguna división, pero que, si se daba, analizarían qué postura tomar. "Tuvimos una reunión de bloque la semana pasada y nadie propuso dividirnos", reveló el diputado Eduardo Valdés, de buen diálogo con todos los sectores internos. "Yo planteé ahí mi idea de que en la unidad está la fortaleza y pregunté qué había de cierto sobre las versiones publicadas. Todos hablaron después en la misma línea, nadie planteó una división"; agregó.
Lo cierto es que el run-rún continuaba aunque nadie se hacía cargo. El politólogo Pablo Salinas subió a las redes un análisis de los bloques parlamentariosdel peronismo de acuerdo a su alineamiento político a nivel nacional, advirtiendo sobre las dificultades de mantener a todos bajo el mismo techo y evitar fugas. Las tensiones podrían acelerarse el año próximo, al compás de las definiciones respecto a 2027. Un panorama confuso, que habrá que esperar todavía un poco para que decante.
