Ucrania mostró el plan de paz que negocia con Europa y está lejos de lo que propuso EE.UU.

El presidente ucraniano Volodimir Zelenski presentó un nuevo plan de paz de 20 puntos para poner fin a la guerra con Rusia. Sin embargo es un plan distinto a la propuesta que Washington difundió en noviembre, que contemplaba algunas garantías para Moscú.

24 de diciembre, 2025 | 17.05

En el marco de las negociaciones de paz para la guerra en Ucrania, el presidente ucraniano Volodímir Zelenski presentó este miércoles un plan de paz de 20 puntos que, según afirmó, negocia con países europeos y que podría "sentar las bases para un acuerdo definitivo" para poner fin a la guerra con Rusia. Sin embargo el documento difundido hoy marca distancia del borrador de 28 puntos impulsado en noviembre por Estados Unidos, al que Kiev consideraba alineado con las pretensiones del Kremlin. 

Después del documento de 28 puntos que Washington presentó en noviembre, Zelenski encaró una serie de conversaciones con la Unión Europea para presentar una nueva propuesta de paz a la guerra con Rusia. Según observadores ucranianos, la opción estadounidense apoyaba muchas de las principales demandas de Rusia. Por esa razón, Zelenski dijo hoy que la mayoría de las posiciones se habían acercado significativamente y por ese motivo logró resumir en una nueva propuesta más breve sus deseos para la paz en su país. Sin embargo, desde Moscú no comentaron de ninguna manera sobre el nuevo plan de Zelenski.

"Ya he respondido a esta pregunta, por lo que no veo sentido en repetirme”, declaró el vocero ruso Dmitri Peskov al ser solicitado por comentarios sobre el documento nuevo, según explicaron desde la agencia RT. "Todos los principales parámetros de la posición de la parte rusa son bien conocidos por nuestros colegas de Estados Unidos", agregó.

Sin embargo la nueva propuesta que Zelenski propuso hoy dista de lo que los estadounidenses presentaron en noviembre pasado.

Los principales cambios de Zelenski al plan de paz estadounidense

El borrador estadounidense contemplaba que Ucrania cediera Donetsk, Lugansk y Crimea y aceptara divisiones en Jersón y Zaporiyia. Mientras tanto la propuesta actual reafirma "sin matices" la soberanía ucraniana y deja el capítulo territorial sin resolver. Kiev sostiene la necesidad de congelar los combates en las líneas actuales, una fórmula que evita cualquier concesión formal a Moscú y que difícilmente cumpla las exigencias rusas.

También hay diferencias entre el enfoque de seguridad y el militar. Mientras que el borrador norteamericano exigía una reducción del ejército de Ucrania a 600.000 soldados, prohibía el despliegue de tropas de la OTAN en territorio ucraniano y limitaba la presencia militar europea al flanco oriental en países como Polonia, Zelenski prevé mantener unas fuerzas armadas de 800.000 efectivos y reciba garantías de seguridad equivalentes al artículo 5 de la OTAN, exigiendo el respaldo de Estados Unidos, la Alianza Atlántica y la Unión Europea. 

El otro punto de choque es la cuestión institucional. Mientras que Rusia exige que Ucrania se quede afuera de la OTAN y la Unión Europea, cosa que Estados Unidos contempló en su plan inicial, en la propuesta de Zelenski figura el ingreso de su país a la Unión Europea con una fecha definida y no se explicita una renuncia formal a la OTAN

Uno de los puntos más inquietantes tiene que ver con la administración de la central nuclear de Zaporiyia, la más grande de Europa y actualmente bajo control ruso. Mientras Washington planteó una gestión tripartita entre Ucrania, Estados Unidos y Rusia, con reparto equitativo de la energía producida, Kiev propone ahora una administración conjunta solo con Estados Unidos, excluyendo a Rusia y garantizándole a Ucrania al menos la mitad del suministro eléctrico.

El otro punto al rojo vivo es el económico. Estados Unidos propuso asegurar alrededor de 100.000 millones de dólares para la reconstrucción de Ucrania a base de activos rusos congelados, mientras que para Rusia ofrecía la reincorporación a la economía global y al G8. Zelenski cambió todo: no ofreció garantía alguna a Moscú y exige un esquema de reconstrucción con fondos internacionales de 800.000 millones de dólares. 

En conjunto, el nuevo plan presentado por Kiev se asemeja menos a un compromiso negociado y más a una declaración de principios ucraniano-europea. Frente a un borrador estadounidense que buscaba cerrar la guerra incorporando concesiones duras para Ucrania, la propuesta de los 20 puntos redefine la discusión en términos mucho más favorables para Kiev y deja abierta la incógnita central: qué estaría dispuesta a ofrecer Rusia a cambio.