El Mundial 2026 no solo marcará un récord histórico de participantes, sino que también contará con un cambio clave para la fase de grupos: un sistema de desempate que vuelve después de casi dos décadas. La Selección Argentina, atenta al nuevo formato y a un posible escenario de igualdad de puntos, mira de reojo una regla que puede alterar cálculos y proyecciones en el torneo que se disputará en Estados Unidos, México y Canadá.
La Copa del Mundo de 2026 será la primera en la historia en contar con 48 selecciones, una expansión que no solo modifica el número de participantes, sino también la manera en la que se ordenarán las posiciones en la fase de grupos. Según detalla la FIFA en su reglamento, la organización decidió recuperar un criterio que no se aplicaba desde Alemania 2006: la ventaja por enfrentamiento directo como primer factor de desempate entre equipos igualados en puntos.
Este cambio no es menor. Con más selecciones, más partidos y grupos más variados, el margen de error se reduce. Y por eso la "Albiceleste" sigue con atención esta normativa que puede redefinir estrategias desde el primer partido.
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La regla que cambia todo: el valor del mano a mano en la tabla
En ediciones recientes del Mundial, el orden en caso de empate comenzaba casi siempre por la diferencia de gol total. Sin embargo, en 2026 ocurrirá lo contrario: si dos o más equipos finalizan con la misma cantidad de puntos, el primer criterio para desempatar será el resultado del enfrentamiento directo, es decir, quién ganó el partido entre ellos.
Esto implica que un triunfo ajustado contra un rival directo podría valer más que golear a un tercero de menor nivel, una lógica que se aplicó en el Mundial de Clubes 2025 y ahora salta al certamen de selecciones más importante del planeta.
Criterios de desempate entre equipos igualados en el grupo
De acuerdo con el documento oficial, si persiste la igualdad luego del resultado directo, la FIFA aplicará esta secuencia:
- Mayor diferencia de gol en los partidos entre las selecciones involucradas.
- Más goles convertidos en esos enfrentamientos directos.
- Mejor diferencia de gol global en todos los partidos del grupo.
- Más goles marcados en la totalidad de los encuentros.
- Puntaje de fair play, determinado por tarjetas amarillas y rojas (amarilla = 1 punto; doble amarilla = 3; roja directa = 4; amarilla + roja directa = 5).
Este último criterio ya definió clasificaciones en ediciones recientes, como sucedió en Rusia 2018 con Japón. En un Mundial ampliado y con mayor paridad entre selecciones de segundo y tercer nivel, podría volver a ser determinante.
¿Por qué la Selección Argentina presta atención a esta norma?
Para la Selección Argentina, que llega como campeona del mundo y candidata natural, el nuevo sistema agrega una variable estratégica. En una fase de grupos que podría presentar rivales de distintas regiones y estilos, perder un enfrentamiento directo contra un rival que luego empate en puntos podría complicar la clasificación, incluso con buena diferencia de gol.
El cuerpo técnico y los analistas del seleccionado seguirán de cerca este detalle: ya no alcanza con “ganar y golear”, sino que ciertos partidos adquieren un valor decisivo desde la matemática del grupo.
Además, con un calendario más cargado y posibles rotaciones, gestionar tarjetas y el fair play también será clave para evitar quedar rezagado en desempates finos.
Los mejores terceros y otra tabla que cambia la ecuación
La expansión del Mundial agrega una novedad: los ocho mejores terceros de los 12 grupos también avanzarán a los 16avos de final. Para definirlos, la FIFA armará una tabla general entre los terceros, pero allí sí aplica otro criterio.
Como las selecciones no se enfrentan entre sí, el primer criterio será:
- Diferencia de gol total.
- Si dos o más equipos empatan en puntos y diferencia de gol, se considerarán:
- Goles a favor.
- Fair play, nuevamente como recurso final.
Esto permitirá que equipos que pierdan un partido pero mantengan buenos números globales puedan avanzar, una situación muy distinta a mundiales anteriores. Para los analistas argentinos, esto abre un abanico de escenarios posibles, ya que el cruce de 16avos de final puede emparejar a la Albiceleste con selecciones fuertes que lleguen desde esta vía.
