Entre las diversas opciones que nuestro país ofrece para disfrutar de las próximas vacaciones, se presenta el pueblo de Angualasto. Esta diminuta localidad de montaña se ubica al sureste de la provincia de San Juan, en el Departamento Iglesia y es reconocida en toda la nación como uno de los sectores habitados más secos de Argentina. Este pequeño poblado no es reconocido sólo por su clima árido, ya que quienes se trasladen a esta villa de menos de 400 habitantes, encontrarán que la misma es muy rica en historia y cultura.
Uno de los principales atractivos de este pequeño pueblo es que el mismo se encuentra próximo a una zona arqueológica, compuesta por una aldea antigua y un yacimiento, el cual impresiona a los viajeros de todo el mundo.
Por su parte, el apodo de "el pueblo más seco del país" se lo debe a su bajo nivel de precipitaciones anuales, por el que acumula en promedio una cantidad de escasos 24 milímetros de lluvia por año, este porcentaje la vuelve una de las localidades con más desertificación del país, siendo solo alcanzada por sectores despoblados, de los cuales no se tiene información oficial que compruebe el grado de sequía de los mismos.
Características del pueblo
La forma más recomendada para llegar al pueblo de Angualasto es mediante la Ruta Provincial 430, la cual le permite a los vecinos y a los turistas trasladarse entre la localidad y el resto de la provincia de San Juan. En el recorrido para llegar a esta peculiar localidad, uno puede encontrarse con un paisaje montañoso, el cual se caracteriza por la escasez de vegetación, sin embargo, esto cambia al aproximarse a las zonas aledañas al pueblo, el cual es descrito como un oasis.
Una vez entrados en esta localidad sanjuanina, se pueden apreciar diversas especies de árboles, las cuales conservan su vida gracias al río Blanco que avanza a una pequeña distancia del centro, factor que fue determinante para la creación de una aldea hace miles de años, la cual hasta el día de hoy se mantiene.
Los habitantes de aquel poblado construyeron un yacimiento de 230 hectáreas de superficie, este también se conserva al día de hoy y se ubica muy cerca del actual pueblo sanjuanino. Estos dos espacios siguen siendo estudiados, labor que se realiza desde 1978, a su vez, desde el año 2009, fueron declarados Monumento Histórico Nacional y se encontraron múltiples objetos de los antiguos pobladores, como corrales, tumbas y piezas textiles, entre otros.
