No hay dudad de que los perros son los mejores amigos de los humanos y siempre estamos preocupados por su bienestar. Por eso, conocer sobre la pioderma es clave para poder detectarla a tiempo y evitar que nuestra mascota sufra. ¿Cómo se identifica y cuál es son su tratamiento?
Qué es la piordema: cuántos tipos hay
La pioderma es el término médico que se utiliza para denominar a las infecciones bacterianas en la piel. La palabra literalmente significa pus (pio) en la piel (derma). Esta afección puede causar molestias e irritación en la piel de tu perro. Sin embargo, en la mayor parte de los casos el pus no se puede ver a simple vista, según explica la veterinaria Dra. Julie Buzby con más de 20 años de experiencia.
Al ser causada por diferentes tipos de bacterias, el problema estará en dónde se encuentre y no en la bacteria en sí. Ya que las bacterias consideradas "normales" que se encuentran en la superficie de la piel de los perro pueden tener un efecto protector al impedir la invasión de otros patógenos (es decir, agentes causantes de enfermedades).
Como ocurre con los humanos, la piel de los perros funciona como una barrera física que retiene el agua y expulsa los patógenos. Si está sana, las bacterias cutáneas normales, como el Staphylococcus pseudintermedius, permanecerán en la superficie, pero si está agrietada o lesionada permite que las bacterias superficiales invadan las capas cutáneas y provoquen una infección. Como la Staphylococcus se encuentra en la boca, al lamer y morder la piel el animal puede aumentar todavía las bacterias en la zona y genera una pioderma.
Existen tres tipos de pioderma bacteriana según su ubicación:
- Pioderma en la superficie: se encuentra justamente en la parte superior de la superficie de la piel.
- Pioderma superficial: afecta la capa más externa de la piel (es decir, la epidermis) y, en ocasiones, los folículos pilosos. También se denomina foliculitis bacteriana superficial.
- Pioderma profunda: la infección se encuentra en las capas más profundas de la piel.
Cómo saber si es pioderma: las señales para detectarla
Las pioderma puede encontrarse en cualquier parte del cuerpo del animal, pero las piodermas bacterianas suelen encontrarse en zonas con poco pelo que proteja la piel, como la zona baja del viente, o donde la humedad o el sudor se acumulan, los pliegues faciales y cutáneos.
Entre los signos a los que hay que prestarle atención se encuentran:
- Pequeñas protuberancias rojas llamadas pápulas:
- Granos o puntos blancos
- Aumento del color rosado o enrojecimiento de la piel.
- Comedones o puntos negros
- Pelo que se levanta en los perros de pelo corto (parece urticaria)
- Alopecia, es decir, pérdida del cabello
- Escamas y costras de piel seca
- Áreas circulares con bordes escamosos
- Áreas ulceradas en la superficie de la piel.
- Hiperpigmentación, es decir, oscurecimiento de la piel
- Engrosamiento de la piel
- Picazón, especialmente si el perro también tiene alergias, esto incluye que el animal se rasque, lama, muerda, mastique, se arrastre o frote contra el suelo o las paredes
- Olor anormal en la piel
- Secreción de color amarillo rosado de la piel
Cuál es el tratamiento para la pioderma en perros
Lo mejor en caso de identificar pioderma en tu perro es acudir al veterinario. Una vez que el especialista lo diagnostique, el animal deberá someterse a un tratamiento que dependerá del tipo de pioderma presente, la causa y los síntomas que tenga tu mascota. Algunos perros con pioderma superficial por estafilococos podrían requerir únicamente terapia tópica, como alguna crema. Mientras que los que tienen pioderma profunda, necesitarán una combinación de tratamiento tópico y antibióticos. Si bien no hay un tratamiento para todos los casos, la Dra Buzby señala que está demostrado que la terapia tópica puede ralentizar el desarrollo de resistencia bacteriana por lo que habitualmente se utiliza.
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