"Todavía estoy peleando", respondía Germán Martínez, reelecto este martes jefe del bloque de diputados de Unión por la Patria, a quien lo consultara respecto a la condición de primera minoría. La foto de los últimos días fue la Casa Rosada sumando diputados para La Libertad Avanza -"siguen de shopping", definían en el peronismo-, fue la contracara de Unión por la Patria, que veía sus legisladores tentados por salir. El gobernador de Catamarca, Raúl Jalil, recibió los peores calificativos por firmar la salida de tres de sus cuatro diputados y relegar a UP al papel de segundo bloque legislativo, con la consecuente pérdida de lugares en comisiones y organismos. La cuenta provisoria daba 95 a LLA y 93 o 94 a UP, pero en el peronismo buscaban sacar algún as de la manga con legisladores de monobloques y bancadas provinciales. O, al menos, juntar las suficientes adhesiones como para ponerle un freno al presidente de la Cámara, Martín Menem, y que no tuviera mayoría propia para manejar los cargos a su antojo.
La situación, impensada hasta un par de meses atrás, quedó clara a partir de las actitudes de Jalil de los últimos días, con sus frecuentes encuentros con funcionarios y sus quejas públicas acerca del poco margen de maniobra que permitía la conducción del peronismo, férreamente opositora al modelo libertario. Sin embargo, en la bancada de diputados se mantenían en contacto permanente con los diputados catamarqueños, quienes decían no tener información respecto a una eventual salida. Eso, y la supuesta negativa de la ex gobernadora, actual senadora y vicepresidenta 2° del PJ, Lucía Corpacci, a una ruptura, les hicieron suponer hasta último momento que no estaba dicha la última palabra. Todo se disipó este martes al mediodía, cuando los catamarqueños no se presentaron a la reunión de bloque y, al mismo tiempo, dieron a conocer la carta en la quen le comunicaban a Menem de la conformación del bloque "Elijo Catamarca" integrado por los diputados Sebatián Nóblega, Fernando Monguillot y Fernanda Avila.
"Bueno, se fueron tres de cuatro", era el magro consuelo que se hacían en el bloque dado que Corpacci al menos había conseguido retener a Claudia Palladino en UP. Sin embargo, había quienes desconfiaban y creían que incluso esa decisión podría haber formado parte de un acuerdo entre los dos referentes catamarqueños. "Ellos nunca se pelean", rumeaba un diputado. Incluso, el legislador comentó que había tenido el fin de semana un encuentro con Jalil en el que, lejos de convencerlo para que se mantuviera dentro de Unión por la Patria, como había supuesto, resultó al revés: el gobernador buscó persuadirlo de la conveniencia de que fuera a charlar con el ministro del Interior, Diego Santilli y abriera una vía de diálogo con el Ejecutivo. "Me cayó muy mal, me pareció que sólo buscaba hacer negocios", comentó el diputado. De hecho, una versión extendida indicaba que, a cambio de la ruptura de la bancada, Catamarca recibirá las acciones en manos del Estado del yacimiento minero Aguas de Dionisio.
En la reunión de bloque estuvieron todos los sectores -Máximo Kirchner, Juan Grabois, el Frente Renovador y los que responden a los gobernadores-, quienes decidieron ratificar por un nuevo período la conducción que encabezan Germán Martínez, Cecilia Moreau como vicepresidenta de la Cámara y Paula Penacca como secretaria parlamentaria. Se discutió que se le debía dar un lugar a los gobernadores, que con razón se quejan de que son poco escuchados a la hora de tomar decisiones. Martínez planteó la creación de una "mesa federal" integrada por representantes de las provincias, una idea que se venía trabajando en el peronismo. "Si querés que algo no se resuelva, armá una mesa", replicó entonces el massista Guillermo Michel, parafraseando a Perón respecto a las comisiones. Victoria Tolosa Paz propuso entonces que se les a los jefes provinciales la vicepresidencia del bloque, un cargo que está vacante. La cuestión es que ahora, con Jalil y el tucumano Osvaldo Jaldo ya afuera, no quedaba claro quién podía ser ese representante del interior. Quedaron en seguir conversando.
Luego se enteraron que La Libertad Avanza había cerrado la adquisición del diputado Francisco Morchio, referenciado en el gobernador de Entre Ríos, Rogelio Frigerio, y que hasta hace no mucho era crítico de Javier Milei. Se supone que con la cosecha de los últimos días La Libertad Avanza llegó a los 95 integrantes. En Unión por la Patria todavía hacían un último esfuerzo porque no rompiera filas el puntano Jorge "Gato" Fernández -ahí llegarían a 94- y había gestiones por arrimar algún otro legislador de un monobloque o de bloque de dos. "No perdemos las esperanzas de mantener la primera minoría", deslizó el diputado Eduardo Valdés, de buen diálogo con las demás bancadas opositoras. En verdad, había varias iniciativas dando vueltas para formar bloques que reúnan lo que está disperso y así tener más fuerza para negociar lugares en las comisiones. Será una mañana de miércoles de conversaciones intensas porque todo debe quedar resuelto antes de las 13, cuando se inicie la toma de juramento de los nuevos diputados, dado que inmediatamente después se elegirán las autoridades.
