Eduardo Feinmann estalló por la marcha de la CGT y no contuvo su enojo: "Mugrientos"

Luego de que se realice la marcha de la CGT en contra de la reforma laboral de Javier Milei, Eduardo Feinmann estalló y no pudo ocultar su enojo.

18 de diciembre, 2025 | 21.45

La movilización convocada por la CGT este jueves en Plaza de Mayo contra la reforma laboral impulsada por el gobierno de Javier Milei no solo generó repercusiones políticas, sino también un fuerte cruce mediático. Uno de los más duros fue el de Eduardo Feinmann, quien desde su programa descargó una catarata de críticas contra la central sindical por el estado en el que quedó el espacio público tras la protesta.

Visiblemente indignado, el periodista apuntó directamente contra los manifestantes y la dirigencia gremial. “Son unos mugrientos”, lanzó al aire, en referencia a la basura que, según remarcó, quedó desparramada en la Plaza de Mayo una vez finalizada la movilización.

La furia de Eduardo Feinmann al ver el rechazo a la reforma en las calles

Feinmann fue más allá y reclamó una sanción económica concreta. “El Gobierno de la Ciudad le tiene que pasar la factura de 200 millones de pesos a la CGT”, sostuvo, al tiempo que cuestionó lo que consideró una doble vara discursiva por parte de los sindicatos.

“Muchos de ellos hablan del cambio climático y del medio ambiente, pero dejan todo hecho un asco”, disparó el conductor, marcando una contradicción entre los discursos públicos y el comportamiento durante la protesta.

La marcha, organizada por la CGT en rechazo a los cambios propuestos en la legislación laboral, reunió a columnas de distintos gremios y organizaciones sociales en el centro porteño. Desde el sindicalismo denunciaron un avance contra los derechos de los trabajadores, mientras que desde el oficialismo y sectores afines volvieron a poner el foco en los métodos de protesta y sus consecuencias.

La marcha de la CGT contra la reforma laboral.

Las declaraciones de Feinmann rápidamente se viralizaron en redes sociales y reavivaron el debate sobre las movilizaciones. Como ya ocurrió en otras ocasiones, el periodista se alineó con una postura crítica hacia la manifestación de los trabajadores y defendió al gobierno, desde el supuesto temor por el espacio público.