Luego que el magnate estadounidense Elon Musk renunciara a su gabinete y lo cuestionara con dureza por un proyecto de presupuesto que tildó de "abominación repugnante", el presidente estadounidense, Donald Trump, salió a contestarle y aseguró sentirse "muy decepcionado" con el empresario más rico del mundo. Además, el mandatario republicano advirtió que "no sabe" si seguirá teniendo la "relación excelente" que mantenía con el fundador de Tesla.
"Estoy muy decepcionado de Elon. Lo he ayudado mucho”, dijo Trump a periodistas presentes en una conferencia de prensa en la Casa Blanca. El presidente estadounidense le recriminó a Musk quejarse del megaproyecto de presupuesto que días atrás mandó al Parlamento, hecho que motivó la salida del magnate de la asesoría presidencial. “Conocía cada aspecto de este proyecto de ley. Lo conocía mejor que casi nadie, y nunca tuvo ningún problema hasta justo después de irse”, remarcó.
De esta manera, Trump confirmó el deterioro de su vínculo con Musk y planteó que podría "el siguiente" en atacarlo personalmente como no lo hizo hasta ahora. “Estoy seguro de que será el siguiente", indicó el mandatario, y luego agregó: "Elon y yo teníamos una relación excelente. No sé si la seguiremos teniendo”.
Minutos después de conocer estas declaraciones, el CEO de Tesla se descargó en redes sociales al recordarle a Trump antiguos mensajes suyos en los que solicitaba que el presupuesto sea equilibrado. "¿Dónde está el hombre que escribió estas palabras? ¿Lo reemplazó un doble de cuerpo?", escribió Musk, y adjuntó una captura de aquellos comentarios del mandatario.
Por qué Musk le soltó la mano
Días atrás, el presidente estadounidense mandó al Parlamento un megaproyecto de presupuesto que prevé un alivio fiscal e impuestos a las remesas. También reduciría drásticamente el presupuesto para financiar una extensión de sus recortes de impuestos de 2017, y desde la Casa Blanca creen que estimularía el crecimiento económico. Otros análisis independientes concluyeron en que, teniendo en cuenta el supuesto crecimiento, añadirá entre 2,5 y 3,1 billones de dólares a los déficits de la próxima década. Por este motivo sería que Musk puso el grito en el cielo.
El magnate ya había cuestionado la iniciativa en una entrevista que se publicó la semana pasada y en la que se mostró "decepcionado" por el “enorme gasto público” que, a su juicio, traería la ley fiscal que está impulsando la bancada republicana en el Congreso. En un posteo de X, también lo calificó como "una abominación repugnante", además de definirlo como un "enorme, desmesurado y escandaloso proyecto de ley".
"¡Qué vergüenza para quienes votaron a favor! Saben que hicieron mal. Lo saben", dice al final el mensaje del dueño de Tesla apuntando hacia al Senado, donde se tratará el proyecto después de la ajustada aprobación en la Cámara de Representantes -la Cámara baja estadounidense-, que ganó por 215 a 214.
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